Algunas de sus principales características son:
Cotizan en los mercados de valores, aunque no siempre. 
El precio varía con respecto al valor que está ligado, el llamado “activo subyacente”. 
También puede ser referido a productos no financieros ni económicos, como son las materias primas, como el oro, el trigo o el arroz. 
Normalmente la inversión es muy inferior a las acciones o parte del valor subyacente. 
Los derivados financieros tienen una cualidad indispensable: siempre se liquidan de forma futura.