Por ello es obvio, que las relaciones de aquellos que forman el sistema financiero discurra sin excesivas alteraciones.
Aunque en un sistema financiero existen diferentes componentes de inestabilidad, que podrían debilitar la estabilidad del sistema, un sistema financiero estable tiene capacidad para limitar y resolver distintos desequilibrios -en parte mediante mecanismos de auto-corrección- antes de que se desencadene una crisis.